Capacitación en tiempos de crisis
Si la capacitación le parece cara, pruebe con la ignorancia. – Watson –
En tal caso y como mínimo, el mensaje que estarían dando no es muy bueno ya que estarían diciendo, “estábamos regalando el dinero”.
Lo que una crisis requiere, sí es repensar las necesidades de capacitación.
Es casi seguro que existan algunas habilidades estratégicas en las que haya que profundizar y otras nuevas que se necesiten desarrollar para capear eficientemente la situación.
Por capear eficientemente la situación me refiero a aprovechar las circunstancias para:
• Identificar y aprovechar las oportunidades que toda crisis tiene.
• Maximizar nuestras fortalezas.
• Minimizar nuestras debilidades.
• Fidelizar nuestras relaciones internas y externas y así retener talentos, clientes y proveedores clave.
• Quedar mejor parados al final del proceso
¿Podría alguien decir que alguno de estos puntos no es importante durante una crisis?
Invertir recursos en lograrlos, ¿podría ser considerado una banalidad pasible de ser descartada sin más trámite?
¿Es posible lograrlos sin darle a la gente los modelos, las herramientas y el entrenamiento necesarios?
En lugar de eliminar el presupuesto de capacitación lo que hay que hacer es pensar estratégicamente y desarrollar un nuevo plan que apoye los puntos anteriores y que sea coherente con el plan estratégico que la compañía tiene para superar el trance.
Lo que es necesario en esas circunstancias, es que de acuerdo con el plan general de la empresa se haga:
• Un diagnóstico correcto de las competencias necesarias a desarrollar desde el nivel organizacional más alto, hasta el nivel operativo.
• Un nuevo plan de actividades ajustadas a ese diagnóstico.
La ejecución rigurosa de ese plan.
Una evaluación periódica de resultados, que nos permita reajustar el plan en forma eficiente. Si esto se hace de esta manera, es seguro que lo que se invierta, sea esta suma igual, mayor, o menor que lo que se venía invirtiendo en el pasado, estará generando valor, por lo que nunca sería conveniente recortarla ciegamente. Por último, creo que algunas frases pueden ser útiles para ir al fondo de la situación, en forma más breve: