Al igual que los atletas profesionales confían en los entrenadores para perfeccionar sus habilidades y alcanzar el máximo rendimiento, los colaboradores pueden beneficiarse del entrenamiento para sobresalir en sus funciones. En varias organizaciones que hemos visitado, esta idea es tan importante que los títulos de los gerentes han sido renombrados como «coach«, y los líderes han recibido capacitación para aprender cómo ayudar a su gente a mantenerse comprometida, productiva y capaz de alcanzar sus objetivos de desarrollo profesional.

En una cultura de coaching, los líderes dedican tiempo cada semana a proporcionar orientación, retroalimentación y apoyo a su gente con el objetivo de desbloquear el potencial sin explotar. Sin embargo, a medida que muchas de estas organizaciones se han adaptado al trabajo híbrido y totalmente remoto en los últimos años, los coaches tienen que refinar sus enfoques.

¿Qué pueden hacer los líderes de equipo para entrenar de manera más efectiva a sus empleados cuando esas personas no pueden estar con ellos en persona?

1. Aprovechar la tecnología: Para fomentar un coaching más eficaz en un mundo híbrido, la tecnología es vital. Pero una solución tecnológica única no sirve para todos. Para mantener puntos de contacto regulares con los miembros de su equipo, los gerentes deben utilizar una variedad de herramientas, desde videoconferencias hasta apps de mensajería instantánea y software de gestión de proyectos.
2. Establecer expectativas y objetivos claros: Con los miembros del equipo remotos e híbridos, la comunicación clara de las expectativas es más esencial que nunca. Los gerentes deben trabajar con cada colaborador para establecer objetivos que sean interesantes para ellos, vinculados a los valores y prioridades del equipo y la organización, y que los ayuden a estirarse y crecer. Luego, los gerentes deben revisar estos objetivos (así como los obstáculos que han surgido) en sus reuniones individuales semanales para realizar un seguimiento del progreso, ofrecer comentarios y realizar los ajustes necesarios. La primera pregunta que hace un gerente en estas reuniones es: «¿De qué quieres hablar?» El coach/gerente también puede plantear preguntas como «¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?» «¿Qué te hace querer presionar el botón de repetición de tu alarma?» y «¿Qué apoyo necesitas?»
3. Fomentar una cultura de confianza y responsabilidad: La confianza es crucial dentro de los equipos remotos e híbridos, y los gerentes pueden cultivar altos niveles de confianza cuando los colaboradores se sienten empoderados para expresar sus preocupaciones, compartir ideas y no son castigados cuando toman la iniciativa. Reconocer con frecuencia los logros es esencial para generar confianza, al igual que ofrecer comentarios constructivos cuando sea necesario. Muchos gerentes son más reacios a pedirles a los empleados que rindan cuentas cuando trabajan de forma remota. Pero no hay nada negativo en la rendición de cuentas, siempre y cuando sea en parte positiva y en parte constructiva. La rendición de cuentas, cuando es específica y enfocada, demuestra que el gerente está prestando atención y está comprometido con el desarrollo y el éxito de la persona.
4. Enfatizar la empatía y la inteligencia emocional: Aquellos que trabajan en casa pueden experimentar profundos sentimientos de aislamiento y desconexión, agotamiento o confusión entre el trabajo y la vida personal. Los gerentes deben demostrar una mayor empatía e inteligencia emocional con los miembros del equipo remoto. Esto significa conocer la historia de fondo de cada persona, lo que la motiva y sus circunstancias individuales; así como escuchar activamente las preocupaciones cuando surjan, y ofrecer apoyo compasivo y oportuno. Proporcionar recursos para el apoyo a la salud mental y el bienestar también puede ayudar a los empleados a superar mejor los desafíos del trabajo remoto.
5. Fomentar el aprendizaje y el desarrollo continuos: Aquellos que trabajan de forma remota pueden sentirse olvidados cuando se trata de oportunidades de aprendizaje. Las mejores culturas híbridas hacen todo lo posible para ofrecer oportunidades a los colaboradores remotos para mejorar sus habilidades y conocimientos, tanto de forma independiente como en grupo. Proporcionan acceso a recursos de formación relevantes, oportunidades de tutoría y ocasiones para trabajar en equipos multifuncionales. Al invertir en el desarrollo de sus colaboradores, los gerentes los capacitan para que sobresalgan en sus roles actuales y los preparan para futuros avances profesionales dentro de la organización.

El coaching efectivo en entornos de trabajo remotos e híbridos requiere que los gerentes piensen de nuevas maneras. Al aprovechar diversas soluciones tecnológicas, establecer expectativas claras, fomentar una mayor confianza y responsabilidad, enfatizar la empatía y la inteligencia emocional, y fomentar el aprendizaje y el desarrollo continuos, los gerentes pueden capacitar a sus equipos para lograr el éxito independientemente de su ubicación física.